Leonardo da Vinci fue un artista florentino y uno de los grandes maestros del Alto Renacimiento, quien era famoso por ser pintor, escultor, arquitecto, ingeniero y científico. Su profundo amor por el conocimiento y la investigación fue la clave tanto de su comportamiento artístico como científico. Sus innovaciones en el campo de la pintura determinaron la evolución del arte italiano durante más de un siglo después de su muerte, y sus estudios científicos, particularmente en las áreas de anatomía, óptica e hidráulica, anticiparon muchos de los desarrollos de la ciencia moderna.
VIDA
Leonardo nació el 15 de abril de 1452, en el pequeño pueblo toscano de Vinci, cerca de Florencia. Era hijo de un notario florentino rico y una mujer campesina. A mediados de la década de 1460 la familia se estableció en Florencia, donde Leonardo recibió la mejor educación que Florencia, el centro intelectual y artístico de Italia, podía ofrecer. Rápidamente avanzo social e intelectualmente. Leonardo era elegante, persuasivo en la conversación y un extraordinario músico e improvisador. Hacia 1466 se convirtió en aprendiz de Garzone (Niño de estudio) a Andrea del Verrocchio, el destacado pintor y escultor florentino de la época. En el taller de Verrocchio, Leonardo se introdujo a muchas actividades, desde la pintura de retablos y tablas para la creación de grandes proyectos escultóricos en mármol y bronce. En 1472 fue inscrito en el gremio de pintores de Florencia y en 1476 todavía es mencionado como ayudante de Verrocchio. En el Bautismo de Cristo de Verrocchio (alrededor de 1470, Uffizi, Florencia), pintó el ángel arrodillado de la izquierda del paisaje de matices neblinosos.
En 1478 Leonardo alcanzó la maestría. Su primer encargo, un retablo para la capilla del Palazzo Vecchio, del ayuntamiento florentino, no llegó a ejecutarse. Su primer cuadro grande, La Adoración de los Magos (que comenzó 1481, Uffizi), que dejó inacabada, se la encargaron en 1481 para el monasterio de San Donato de Scopeto, Florencia. Otras obras de su etapa juvenil son la denominada Madonna Benois (c. 1478, Museo del Ermitage, San Petersburgo), el retrato Ginerva de 'Benci (c. 1474, National Gallery, Washington, DC) y el inacabado San Jerónimo (c . 1481, Pinacoteca, Vaticano).
Acerca de 1482 Leonardo entró al servicio del duque de Milán, Ludovico Sforza, el duque de haber escrito una carta en la que afirmaba que podía construir puentes portátiles, que conocía las técnicas de construcción de bombardeos y de hacer cañones, que podía construir buques, así como vehículos acorazados, catapultas y otras máquinas de guerra, y que él podría ejecutar la escultura en mármol, bronce y arcilla. Se desempeñó como ingeniero en sus numerosas empresas militares del duque y fue activo también como arquitecto. Además, ayudó al matemático italiano Luca Pacioli en su célebre obra Divina Proportione (1509).
Evidencias de que Leonardo tenía discípulos en Milán, para los cuales probablemente escribió los textos que más tarde compilados como Tratado de la Pintura (1651; trad. 1956). El más importante de sus pinturas a principios del periodo Milán fue la Virgen de las Rocas, dos versiones de que existen (1483-85, Museo del Louvre, París; 1490 a 1506-08, National Gallery, Londres), trabajó en las composiciones durante mucho tiempo, como era su costumbre, al parecer dispuesto a terminar lo que había comenzado. De 1495 a 1497 Leonardo trabajaba en su obra maestra, La última cena, un mural en el refectorio del Monasterio de Santa Maria delle Grazie, Milán. Desafortunadamente, su uso experimental de óleo sobre yeso seco (en lo que fue la delgada pared exterior de un espacio diseñado para servir comida) era técnicamente errónea, y en 1500 su deterioro había comenzado. Desde 1726 se ha intentado, sin éxito, para restaurarlo; una restauración concertada y programa de conservación, haciendo uso de la tecnología más avanzada, se inició en 1977 y se está invirtiendo parte de los daños. Aunque gran parte de la superficie original se ha perdido, la grandiosidad de la composición y la penetración de los personajes dan una visión fugaz de su pasado esplendor. Durante su larga estancia en Milán, Leonardo también realizó otras pinturas y dibujos (la mayoría de los cuales no se conservan), escenografías teatrales, dibujos arquitectónicos y modelos para la cúpula de la catedral de Milán. Su mayor encargo fue el monumento bronce a tamaño colosal de Francesco Sforza, padre de Ludovico, en el patio del castillo Sforzesco. En diciembre de 1499, sin embargo, la familia Sforza fue expulsada de Milán por las tropas francesas Leonardo dejó la estatua inacabada (fue destruida por los arqueros franceses que la usaron como diana) y regresó a Florencia en 1500.
En 1502 Leonardo entró al servicio de César Borgia, duque de Romaña, hijo del papa Alejandro VI, en su calidad de arquitecto mayor del duque y el ingeniero, Leonardo supervisó obras en las fortalezas de los territorios papales del centro de Italia. En 1503 fue miembro de la comisión de artistas encargados de decidir sobre el adecuado emplazamiento del David (1501-04, Academia, Florencia), la colosal estatua de mármol famoso por el escultor italiano Miguel Ángel, y también se desempeñó como ingeniero en la guerra contra Pisa. Hacia el final de este año comenzó a planificar la decoración para el gran salón del Palazzo Vecchio. El tema fue la Batalla de Anghiari, victoria florentina en la guerra contra Pisa. Él hizo muchos dibujos de ella y completó un cartón de tamaño natural, o un dibujo, en 1505, pero nunca llegó a realizar la pintura mural. El cartón se destruyó en el siglo 17, y la composición a través de copias, de los cuales el más famoso es el del pintor flamenco Peter Paul Rubens (c. 1615, Louvre). Durante su segundo periodo florentino, Leonardo pintó varios retratos, pero el único que sobrevive es la famosa Mona Lisa (1503-06, Museo del Louvre). Uno de los retratos más célebres historia de la pintura, también es conocida como La Gioconda, tras el nombre de presunta del marido de la mujer. Leonardo parece haber tenido un afecto especial por la imagen, por lo llevó con él en todos sus viajes.
En 1506 Leonardo entró otra vez a Milán, respondiendo al llamado de su gobernador francés Charles d'Amboise. Al año siguiente fue nombrado pintor de la corte del rey Luis XII de Francia, que residía por entonces en Milán. Durante los siguientes seis años Leonardo repartió su tiempo entre Milán y Florencia, donde a menudo visitaba a sus hermanos y medias hermanas y cuidaba de su herencia. En Milán continuó sus proyectos de ingeniería y trabajó en una figura ecuestre de un monumento a Gian Giacomo Trivulzio, comandante de las fuerzas francesas en la ciudad, aunque el proyecto no se completó, dibujos y estudios se han conservado. De 1514 a 1516 Leonardo vivió en Roma bajo el mecenazgo del papa León X: se alojó en el Belvedere Palacio en el Vaticano, y parece haber sido ocupado principalmente, a la experimentación científica. En 1516 viajó a Francia para entrar al servicio del rey Francisco I. Pasó sus últimos años en el castillo de Cloux (más tarde llamado Clos-Lucé), cerca del palacio de verano del rey en Amboise, en el Loira, donde murió el 2 de mayo de 1519.
OBRAS
Aunque Leonardo producido un número relativamente pequeño de pinturas, muchas de las cuales quedó inacabada, fue un artista extremadamente innovador e influyente. Durante sus primeros años, su estilo estrechamente paralela a la de Verrocchio, pero poco a poco se alejó de las estrictas rígido, su maestro, y el tratamiento un tanto rígido de cifras para desarrollar un manejo más sugerente y atmosférico de la composición. La temprana Adoración de los Magos introduce una nueva forma de composición, en la que las figuras principales quedan reagrupadas en el primer plano, mientras que el fondo se compone de puntos de vista distantes con ruinas imaginarias y escenas de batalla.
Las innovaciones estilísticas de Leonardo se hacen patentes en La última cena, en la que vuelve a crear un tema tradicional de manera completamente nueva. En lugar de mostrar los 12 apóstoles como figuras individuales, los presenta agrupados en la dinámica de composición de tres unidades, enmarcando la figura de Cristo, que está aislado en el centro de la imagen, sentado frente a un paisaje lejano pálida visto a través de una abertura rectangular en la pared, Cristo que está a punto de anunciar que uno de los presentes lo traicionará representa un núcleo calma mientras que los otros responden con gestos animados. En la monumentalidad de la escena y el volumen de las figuras, Leonardo reintroducido un estilo iniciado más de una generación anterior de Masaccio, el padre de la pintura florentina.
La Mona Lisa, la obra más famosa de Leonardo, como es bien conocido por su dominio de las innovaciones técnicas como por el misterio de su objeto legendario sonriendo. Este trabajo es un ejemplo consumado de dos técnicas el sfumato y el claroscuro-de las que Leonardo fue uno de los grandes maestros de primera. Sfumato se caracteriza por la sutil, casi infinitesimal transiciones entre las zonas de color, creando una neblina atmosférica o delicadamente efecto ahumado, es especialmente evidente en las túnicas de gasa delicada usado por la modelo y en su sonrisa enigmática. El claroscuro es la técnica del modelado y la definición de las formas a través de contrastes de luz y sombra, las manos sensibles de la modelo son retratados con una modulación luminosa de luz y sombra, mientras que el contraste de color se utiliza sólo con moderación.
Una característica especialmente notable de pinturas de Leonardo es su orígenes paisaje, en la que él fue uno de los primeros en introducir la perspectiva atmosférica. El jefe de maestros del Alto Renacimiento en Florencia, incluyendo a Rafael, Andrea del Sarto y Fra Bartolommeo, todos aprendimos de Leonardo, él transformó completamente la escuela de Milán, y en el Parma, el desarrollo artístico de Correggio se le dio la dirección de la obra de Leonardo.
muchos dibujos de Leonardo existentes, que revelan su dibujo brillante y su dominio de la anatomía de los seres humanos, animales y plantas, se pueden encontrar en las colecciones europeas principales, el grupo más numeroso es el Castillo de Windsor en Inglaterra.Probablemente su dibujo más famoso es el Ser magnífico retrato (c. 1510-13, Biblioteca Real, Turín).
Debido a que ninguno de los proyectos escultóricos de Leonardo fue llevado a su plenitud, su acercamiento al arte tridimensional sólo puede juzgarse a partir de sus dibujos. Las mismas restricciones se aplican a su arquitectura, pero ninguno de sus proyectos de construcción se llevó a cabo en realidad como él las concibió. En sus dibujos de arquitectura, sin embargo, demuestra maestría en el uso de formas sinuosas, una claridad de expresión, y sobre todo un profundo conocimiento de las antiguas fuentes romanas.
Como científico Leonardo destacaba por encima de todos sus contemporáneos. Sus teorías científicas, al igual que sus innovaciones artísticas, se basan en la observación cuidadosa y la documentación precisa. Comprendió, mejor que nadie en su siglo o en el siguiente, la importancia de la observación científica precisa. Por desgracia, al igual que con frecuencia no llevar a buen fin los proyectos artísticos, nunca completó sus tratados previsto en una variedad de temas científicos. Sus teorías se encuentran en numerosos cuadernos, la mayoría de los cuales fueron escritos en caracteres espejo. Debido a que no eran fácilmente descifrables, descubrimientos de Leonardo no se difundieron en su época; de haber sido publicado, hubieran revolucionado la ciencia del siglo 16. Leonardo anticipa muchos descubrimientos en realidad de los tiempos modernos. En anatomía estudió la circulación de la sangre y la acción del ojo.Realizó descubrimientos en meteorología y geología, aprendió el efecto de la luna sobre las mareas, presagió concepciones modernas sobre la formación de los continentes y conjeturó la naturaleza de las conchas fósiles. Fue uno de los creadores de la ciencia de la hidráulica y probablemente concebido el hidrómetro; su plan para la canalización de los ríos todavía tiene valor práctico. Inventó un gran número de máquinas ingeniosas, muchos potencialmente útiles, entre ellos un traje de buzo bajo el agua. Sus dispositivos de vuelo, aunque no sea posible, encarnado sólidos principios de la aerodinámica.
Un creador en todas las ramas del arte, un descubridor en la mayoría de las ramas de la ciencia, y un inventor de las ramas de la tecnología, Leonardo merece, quizá más que nadie, el título de Homo Universalis, Hombre Universal.
Fuente: Web Gallery of Art
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